Experiencia de aprendizaje 2 - Segunda parte

En mi experiencia personal debo decir que la organización educativa donde me encontré el modelo más viejo fué la Universidad.
Mi recorrido por la escuela primaria y secundaria tuvo matices. Estudié en la EGB y Polimodal público de provincia de Buenos Aires, y en el mismo se notaba cierto esfuerzo de algunos docentes por pensar clases más constructivistas. Por ejemplo, al menos desde el discurso, siempre se planteó al error como parte del proceso de aprendizaje, se promovió la generación de preguntas y de aportes, y los mismos eran valorados.
Recuerdo las clases de matemática de la primaria que iniciaban con el planteamiento de problemas reales que debíamos resolver en grupo. Luego y desde la puesta en común, se construía lo teórico. Recuerdo también que nos deleguen responsabilidades como armar actos o eventos escolares, algunos de los cuales surgían de nuestra demanda. En esta misma escuela también habían rasgos pertenecientes al modelo centrado en contenidos: la promoción de la competencia entre pares y la evaluación estandarizada por ejemplo.
En la secundaria hice la modalidad artística y, tanto en historia del arte, plástica, comunicación, como en filosofía se planteaban clases donde se buscaba la reflexión permanentemente.
La relación educador - educando fué siempre jerárquica como en los modelos conductistas, pero se valoraba la experiencia del alumno.
Cuando llegué a la universidad de Ciencias Naturales me encontré con un panorama muy distinto. Las clases eran todas expositivas y memorísticas, típicas del modelo centrado en el contenido. Recuerdo tener que memorizar todos los invertebrados fósiles sabiendo que me olvidaría los mismos a los 15 días de pasado el final. Contrariamente a lo que uno esperaría, en una carrera de Ciencias, en vez de promover el desarrollo de las habilidades-competencias científicas, se promovía la repetición de contenidos. Además recuerdo que los estudiantes que preguntaban mucho eran mal vistos por los docentes.